Cómo construir refugios improvisados en la naturaleza

Índice de contenido

En situaciones de supervivencia al aire libre, contar con un refugio adecuado es fundamental para protegerse de los elementos y mantener la temperatura corporal. En este artículo, exploraremos diferentes técnicas para construir refugios improvisados utilizando materiales y recursos disponibles en la naturaleza.

Tipos de refugios improvisados

Existen varios tipos de refugios improvisados que se pueden construir según las condiciones ambientales y los recursos disponibles. A continuación, describimos algunos ejemplos de refugios y cómo construirlos.

Refugio de lona

Si tienes una lona, una manta de emergencia o incluso un poncho, puedes construir un refugio simple pero efectivo en poco tiempo. Ata una cuerda entre dos árboles y coloca la lona sobre ella, fijando las esquinas al suelo con estacas o piedras. Asegúrate de que el refugio esté inclinado para permitir que el agua de lluvia se escurra y orientado de manera que proteja contra el viento dominante.

Refugio de ramas

Construcción de un Refugio

Un refugio de ramas consiste en una estructura hecha de ramas caídas y otros materiales naturales. Busca una rama larga y resistente para utilizar como viga principal y colócala en una posición inclinada, apoyada en un árbol o roca. Luego, coloca ramas más pequeñas y hojas a lo largo de la viga principal para formar las paredes del refugio. Finalmente, cubre las paredes con hojas, hierba, musgo u otros materiales para proporcionar aislamiento y protección contra el viento y la lluvia.

Refugio de nieve (quinzhee o iglú)

Un Iglú: Paradigma de Arquitectura Sostenible - ECOesMÁS: Blog de  Arquitectura Sostenible y Casas Ecológicas

Si te encuentras en un entorno nevado, puedes construir un refugio de nieve, como un quinzhee o un iglú. Un quinzhee se construye amontonando nieve en una pila grande y luego excavando un túnel y una cámara en su interior. Un iglú, por otro lado, se construye utilizando bloques de nieve cortados y apilados en forma de cúpula. Ambos refugios ofrecen protección contra el viento y el frío, y aprovechan las propiedades aislantes de la nieve.

Refugio de trinchera

De ruta por las Trincheras de la Vegatilla de Jérica, con subida al Alto de  Sayas

Un refugio de trinchera es útil en situaciones en las que necesitas protección rápida y temporal. Excava una trinchera en el suelo, aproximadamente de la longitud de tu cuerpo y lo suficientemente profunda para que puedas recostarte en ella. Coloca ramas, hojas o una lona sobre la parte superior de la trinchera y asegúralas con piedras o estacas. Este tipo de refugio ofrece protección contra el viento y puede proporcionar cierto aislamiento térmico.

Consideraciones al construir un refugio improvisado

Al construir un refugio improvisado en la naturaleza, es importante tener en cuenta ciertos factores clave.

Ubicación

Elige un lugar que ofrezca protección contra el viento, la lluvia y otros elementos. También busca un área con recursos naturales disponibles, como madera, piedras y agua. Evita ubicaciones que puedan ser propensas a inundaciones, deslizamientos de tierra o la caída de ramas.

Aislamiento

Un buen refugio debe proporcionar aislamiento para mantener la temperatura corporal y protegerse del frío. Utiliza materiales naturales como hojas, hierba, musgo y nieve para aislar el refugio y crear una barrera térmica.

Ventilación

Es importante asegurar una ventilación adecuada en tu refugio para evitar la acumulación de condensación y permitir el flujo de aire fresco. Sin embargo, no dejes aberturas demasiado grandes que permitan la entrada de viento frío o lluvia.

Tamaño

Un refugio eficiente debe ser lo suficientemente grande como para acomodarte cómodamente, pero no tan grande que disipe el calor. Un espacio más pequeño y compacto retendrá mejor el calor corporal.

Preguntas frecuentes

A continuación, responderemos algunas preguntas comunes sobre la construcción de refugios improvisados en la naturaleza.

¿Cuánto tiempo se tarda en construir un refugio improvisado?

El tiempo necesario para construir un refugio improvisado varía según el tipo de refugio y los materiales disponibles. Algunos refugios, como los de lona, se pueden construir en menos de una hora, mientras que otros, como los quinzees o iglús, pueden llevar varias horas.

¿Qué herramientas necesito para construir un refugio improvisado?

Aunque algunas herramientas pueden facilitar la construcción de un refugio improvisado, la mayoría de los refugios se pueden construir utilizando solo los materiales y recursos disponibles en la naturaleza. Sin embargo, llevar un cuchillo, una cuerda y una lona en tu equipo de supervivencia puede ser de gran ayuda.

¿Qué debo hacer si no tengo suficientes materiales naturales para construir un refugio?

Si te encuentras en una situación en la que no hay suficientes materiales naturales disponibles para construir un refugio completo, intenta aprovechar al máximo los recursos que tengas a mano. Utiliza ramas, rocas y otros elementos del entorno para crear barreras contra el viento y el frío y busca áreas naturales protegidas, como cuevas o salientes rocosos.

Conclusión

La construcción de refugios improvisados en la naturaleza es una habilidad esencial para preppers y entusiastas de la supervivencia. Conocer diferentes tipos de refugios, como refugios de lona, de ramas, de nieve o de trinchera, te permitirá adaptarte a diversas situaciones y condiciones ambientales. Ten en cuenta las consideraciones clave al construir un refugio, como la ubicación, el aislamiento, la ventilación y el tamaño. Al dominar estas habilidades, estarás mejor preparado para enfrentar situaciones de supervivencia y protegerte de los elementos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *