Aprende a construir un refugio de supervivencia utilizando materiales naturales y herramientas básicas, ideal para situaciones de emergencia y aventuras al aire libre.
Construir un refugio de supervivencia en la naturaleza es una habilidad esencial para cualquier entusiasta del aire libre o persona que busque estar preparada en caso de emergencia. Este artículo te enseñará cómo construir un refugio de supervivencia utilizando materiales naturales y herramientas básicas.
- Elige la ubicación adecuada
Selecciona un lugar seguro y protegido de los elementos. Asegúrate de que el suelo esté seco y relativamente plano, y que no haya riesgos de inundaciones, deslizamientos de tierra o caída de árboles.
- Recolecta materiales
Recolecta materiales naturales del entorno, como ramas, hojas y musgo. Los materiales que escojas dependerán del tipo de refugio que planees construir y de lo que esté disponible en tu entorno.
- Prepara tus herramientas básicas
Asegúrate de tener contigo las siguientes herramientas básicas:
- Cuchillo
- Cuerda o cordel
- Hacha o sierra (si es posible)
- Decide qué tipo de refugio construir
Existen varios tipos de refugios de supervivencia, como la choza de hojas, el refugio A-frame y el refugio de lona. Elige el tipo de refugio que mejor se adapte a tus necesidades y al entorno en el que te encuentres.
- Construye el refugio
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Choza de hojas: Comienza colocando una rama larga y resistente sobre dos árboles o ramas para servir como columna vertebral. Luego, coloca ramas más pequeñas en ángulo a lo largo de la columna vertebral, asegurándolas con cordel si es necesario. Finalmente, cubre el marco con hojas y musgo, asegurándote de que el material esté apilado lo suficientemente denso como para proporcionar aislamiento y protección contra la lluvia.
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Refugio A-frame: Coloca una rama resistente entre dos árboles o ramas para crear un marco en forma de A. Asegura las ramas con cordel si es necesario. Luego, coloca ramas más pequeñas a lo largo de ambos lados del marco en ángulo, asegurándolas con cordel si es necesario. Cubre el marco con hojas y musgo, asegurándote de que el material esté apilado lo suficientemente denso como para proporcionar aislamiento y protección contra la lluvia.
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Refugio de lona: Si tienes una lona, puedes usarla como base para tu refugio. Ata la lona a árboles o ramas en una configuración que te proteja del viento y la lluvia. Si no tienes árboles disponibles, puedes usar ramas largas y resistentes para crear un marco y luego cubrirlo con la lona.
- Mejora el aislamiento y la comodidad